El cannabis es una flor que ha crecido de forma natural en la naturaleza durante miles de años. Está repleto de componentes químicos, algunos de los cuales se conocen como cannabinoides, que se entrelazan con receptores en todo nuestro cuerpo.
causando un espectro de efectos físicos y mentales.
El THC o delta-9-tetrahidrocannabinol es, con diferencia, el más conocido de estos cannabinoides, pero ciertamente no es el único compuesto químico potente originario de la flor de cannabis. El delta-8-THC, uno de los cuatro cannabinoides más comunes, es similar a su primo psicoactivo, el THC, pero con varias diferencias clave.
¿Qué es el Delta-8-THC?
Según el Instituto Nacional del Cáncer, el delta-8-THC se puede definir como:
“Un análogo del tetrahidrocannabinol (THC) aún no conocido en Italia, con propiedades antieméticas, ansiolíticas, estimulantes del apetito, analgésicas y neuroprotectoras. [Delta-8-THC] se une al receptor CB1 acoplado a proteína cannabinoide G, ubicado en el sistema nervioso central... Este agente exhibe una potencia psicotrópica más baja que [delta-9-THC], la forma principal de THC que se encuentra en el cannabis. "
El delta-8-THC se diferencia químicamente del delta-9-THC solo en unos pocos enlaces atómicos y aún así ofrece un efecto potente. Si bien el delta-8-THC existe naturalmente solo en fracciones de un porcentaje, las empresas están encontrando valor en la concentración de cannabinoides esotéricos por sus efectos y aplicaciones únicos.
La diferencia entre Delta-8 y Delta-9 es sutil: ambos te drogarán, pero el primero es aproximadamente la mitad de potente que el segundo. Mucha gente dice que Delta-8 es una experiencia psicoactiva más suave y menos ansiosa que el más familiar Delta-9. También parece tener efectos medicinales adicionales sobre el THC normal, como un mejor alivio del dolor, pero estas afirmaciones aún no se han evaluado en ensayos clínicos.
Según estas anécdotas, el Delta-8 se está convirtiendo rápidamente en un nuevo producto de cannabis de moda, apareciendo en productos como cartuchos de vapeo, refrescos, gomitas y tinturas. El aumento de popularidad refleja la moda del CBD (cannabidiol) que ya hemos visto y, al igual que con el CBD, todavía no hay mucho control de calidad para los productos. Muchas de las mismas afirmaciones positivas se hacen sobre los productos Delta-8, aunque los científicos aún tienen que estudiar sus efectos en profundidad.