La legalización como impulso económico y social, gracias al crecimiento del empleo, del turismo y del PIB en Croacia. Esta es precisamente la esencia de la propuesta de legalización de la coalición socialdemócrata, que convierte el cannabis en uno de los elementos clave de la campaña electoral para el próximo año.
Davor Bernardic , de 39 años, líder del SDP, dijo en el parlamento: "Creo que con la legalización bajo control estatal podríamos lograr un mayor crecimiento de la economía y de los ingresos, lo que conduciría a la creación de nuevos puestos de trabajo ; “El resultado de la legalización de la marihuana sería un mayor desarrollo del sector turístico, con el crecimiento de la producción agrícola y del PIB”.
Davor también habló sobre el cáñamo industrial, que actualmente todavía se considera un estupefaciente, subrayando: “Hasta el día de hoy todavía no existe una ley que regule el sector industrial, muchos abandonan la producción y los productores que continúan cultivándolo se quejan de las desventajas en comparación con otros países europeos, porque no pueden usarlo libremente”.
De hecho, el cultivo de esta ha sufrido un notable descenso en los últimos 5 años, pasando de 2500 hectáreas cultivadas en 2014 a solo mil en 2016 (totalmente opuesto a lo que sucede en el Bel Paese, donde se ha multiplicado por diez - ed. ), esto se debe a varios problemas: no existen certificaciones nacionales de semillas ni de producción, no hay producción legal de aceite extraído de las flores y ni siquiera un mercado de importación.
El clima croata es muy similar al de Grecia e Italia, lo que lo hace especialmente adecuado para la producción de cáñamo. “Por eso, nos corresponde a nosotros encontrar el espacio para convertirnos en el líder de la UE en el negocio de más rápido crecimiento, la producción de cannabis”, concluye Bernardic. “Somos un país turístico y, dada la experiencia positiva de otros países, la producción de cáñamo industrial y la legalización total de la marihuana con fines recreativos deberían estar en la agenda”.
¡Mucha suerte a Croacia, que parece haber tomado un camino justo y saludable!
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